El Central Romana Corporation valoró este sábado la disposición del Gobierno de designar una comisión de tres entidades oficiales, para que revise la suspensión de entrada de azúcar sin refinar al territorio estadounidense.
La medida adoptada por la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) abarca, además, a los productos elaborados principalmente de azúcar.
El consorcio azucarero agradeció al presidente Luis Abinader haber designado a los ministerios de Trabajo, Relaciones Exteriores e Industria y Comercio, para colaborar con la empresa en ese sentido.
Indica, además, mediante comunicado, que «desde Central Romana estamos abiertos, para iniciar el diálogo con las autoridades correspondientes del país y norteamericanas, con el fin de aclarar las interrogantes a los temas de interés mutuo».
La semana pasada, la CBP indicó en una declaración pública, que en cumplimiento de la medida, el personal de aduanas en todos los puertos de ingreso a Estados Unidos se retendrían los productos de azúcar no refinado (morena) y productos con azúcar hechos por el Central Romana.
El embargo no sólo tomó de sorpresa la empresa de capital estadounidense, sino también el inicio de rechazos en cadena de diversos sectores, por las repercusiones económicas que pudieran acarrear.
La zafa de este año alcanzó una producción de 394,000 toneladas cortas de azúcar, tras culminar una molienda superior a 3,350,000 toneladas cortas de caña, así como más de 152,000 toneladas cortas de azúcar refinado y 18,900,000 galones de melaza.
Esos productos derivados de la caña se registraron durante los 203 días de la zafra de este año, con un rendimiento de 11.75 por ciento, logrando satisfacer la demanda de azúcar en todo el mercado nacional.
Fuente: Elcorreo